Memories

¿Qué hacer cuándo todo se viene abajo? Cuando eso que conocíamos ya no existe, cuando las cosas ya han llegado a un extremo impensado y resultan irreversibles... ¿Qué hacer cuando nada resulta? Cuando no nos quieren escuchar, cuando el afecto no sirve de nada, cuando todo lo vivido ya no tiene sentido alguno...

Desconozco a las personas. Dicen que de los amigos se aprende, y que con ellos se cambia, con ellos se aprende, y que no es necesario cambiar de amigos si uno entiende que los amigos cambian con el tiempo, pero... ¿qué es exactamente lo que tengo que hacer? ¿Seguirlos en sus jugarretas e imitarlos? ¿Hacer el papel de mamá y aburrir a todos con mis pensamientos? ¿Dejarlos hacer su vida y yo seguir por otro camino con la mía?

¿Qué pasa cuando un amigo está yendo por el camino equivocado? Es eso lo que está pasando con mis amigas. No entiendo cómo, cuándo, ni siquiera por qué, pero desde hace varios meses ya no son lo que eran antes. Antes, para nosotras una joda era juntarse a comer algo en alguna casa, salir a bailar, hacer amigos nuevos, comerse un pancho con papas en el Buen Pastor y volver a casa tarde, tipo 6, 7 de la mañana... y si salíamos y estaba lloviendo era todavía más divertido. No nos interesaba el alcohol, los cigarrillos, la marihuana... nada de eso nos atraía, no nos parecían cosas divertidas, creíamos repugnante el hecho de encontrarse con una persona borracha, nos asfixiábamos con el humo de los cigarrillos, y la risa era nuestra mejor compañera. Reíamos absolutamente de todo. No teníamos problemas para trabar amistad con cualquiera. Nos divertíamos sanamente. Si no había plata hacíamos una salida gasolera, y si la había también. Eso fue hasta el año pasado. Teníamos 17 años, nada nos había hecho daño todavía. No voy a mentir que debes en cuando comprábamos algún trago en la barra, pero sólo lo hacíamos por diversión. La verdad es que ansiábamos de una vez por todas ir a Bariloche. Ahí descubrimos la verdadera fiesta. Se respiraba fiesta todos los días, a toda hora, en todos los lugares adonde íbamos. Yo creo que ahí comenzó el verdadero cambio de ellas.

Ahora se juntan a hacer las famosas "previas", que en su tiempo dejaron recuerdos sumamente divertidos de aquel viaje a Río Negro; en cualquier casa donde no haya padres presentes, obvio, les daría vergüenza emborracharse enfrente de ellos. Empezaron a salir de joda todos los viernes y sábados, o casi todos. Yo me prendía de vez en cuando. La situación no da para estar gastando en salidas a bailar. Además, la facultad me demandaba tiempo, no podía descuidarla, ahí está mi futuro. La cosa es que el alcohol se convirtió en prioridad para todas ellas. Coronaron al fernet como "el mejor amigo de la primavera". En la bienvenida a un amigo que se había ido de viaje a Nueva Zelanda por ocho meses, se estaban peleando por un vaso de fernet, y cuando se acabó parecían mujeres desesperadas y necesitadas en busca del alcohol. Yo sabía que les gustaba salir, vivir de joda, sabía que estaban descuidando el estudio, sabía cuan importante es para ellas el hecho de salir todos los fines de semana y tener fiestas y más fiestas... pero no sabía hasta ese momento qué papel jugaba el alcohol en sus vidas. Fue ahí que caí en la cuenta de lo mucho que habían cambiado. Ya no se trataba de un juego, no se trata de un juego... se trata de un estilo de vida, de su futuro, de su presente, de que están destruyendo todo aquello que habían construido de a poco... están perdiendo amigos, quizás la confianza de sus padres, están perdiendo todo y ganando... ¿qué están ganando? No veo nada positivo de esta situación. ¿Qué recuerdo tendrán en el futuro de su vida de adolescentes? Si no recuerdan qué hicieron, adonde estuvieron... no recuerdan nada debido al alcohol, debido a las borracheras... ¿acaso no es importante recordar, tener memoria? ¿Qué ejemplo dejaremos a nuestros hijos, a nuestros nietos?
El alcohol mata, el alcohol destruye, y lo peor de todo es que nos borra la memoria, nos borra la razón. ¿Y qué sentido tiene la vida si llego a un punto y descubro que nada tengo, que todo lo destruí por mi culpa? Ya no tenemos 4 años, en los que nuestra mamá y papá nos ayudaban en todo. Ya no tenemos 8 años en los que todavía eramos puros e inocentes. Ya no tenemos 12 años en donde se comienza a sentir el cambio, donde surgen los miedos e inseguridades, y nos refugiamos en la amiga más cercana. Ya no tenemos 15 años en donde surgen los primeros enamoramientos enserio y soñamos con una vida color rosa. Tenemos 18 años, ya no somos niñas... somos jóvenes y tenemos un futuro por delante, toda una vida para disfrutar, ¿qué pasaría si la destruyéramos sólo por un vicio? No sé si callar o si decir algo. Adoro a esas personitas que ahora están equivocadas, pero ¿cómo ayudarlas? Si ni siquiera quieren escuchar, sólo quieren gritar y divertirse eternamente en una fiesta para sordos. Recuerdo que se quejaban mucho de unas compañeras del cole, las cuales salían siempre y se emborrachaban cada vez que podían. Las criticaban a muerte. Y ahora terminan siendo igualitas a ellas. Quiero que tomen conciencia de lo que están haciendo, pero a mi no me hacen caso. Sólo quiero verlas bien, por respeto y amor a aquellas mujeres que conocí una vez, no por estas que conozco ahora. Sé que tienen el alma herida. A veces sus padres no les prestan demasiada atención, o se ven obligadas a sobrecargarse de estudio, y por eso explotan los fines de semana y se sumergen en el alcohol, pero no es el camino, y ellas lo saben. Ojalá me escucharan. Y nada de esto estaría pasando.




EL ALCOHOL

¿De qué manera afecta al cuerpo?
El alcohol es un depresivo. Esto significa que hace más lento el funcionamiento del sistema nervioso central. El alcohol, en realidad, bloquea algunos de los mensajes que intentan llegar al cerebro. Esto altera las percepciones, las emociones, los movimientos, la vista y el oído de una persona.
En cantidades muy pequeñas, el alcohol puede ayudar a que una persona se sienta más relajada o menos ansiosa. Una mayor cantidad de alcohol provoca cambios más grandes en el cerebro y produce una intoxicación. La gente que bebe cantidades excesivas de alcohol suele tambalearse, pierde la coordinación y tiene dificultad al hablar. Es probable que estas personas se sientan confundidas y desorientadas. Dependiendo del individuo, la intoxicación puede hacer que una persona se muestre simpática y conversadora o agresiva y enojada. Los tiempos de reacción se vuelven mucho más lentos; por eso es que se aconseja no conducir cuando uno bebe. Las personas intoxicadas llegan a pensar que se están moviendo correctamente cuando, en realidad, sucede todo lo contrario. Es posible que actúen de una manera completamente diferente de la habitual.
Si se toman grandes cantidades de alcohol en un lapso de tiempo breve, puede haber envenenamiento por alcohol. El envenenamiento por alcohol es exactamente lo que estás pensando: el cuerpo está envenenado o intoxicado con grandes cantidades de alcohol. El primer síntoma del envenenamiento por alcohol son los vómitos violentos, porque el cuerpo intenta deshacerse del alcohol. Otras consecuencias son la soñolencia excesiva, la pérdida de la conciencia, dificultades para respirar, una peligrosa baja del azúcar en sangre, convulsiones o incluso la muerte.

¿Por qué beben los adolescentes?
Durante la adolescencia, es común que se experimente con el alcohol. Algunos de los motivos por los que los adolescentes beben alcohol o prueban las drogas son los siguientes:

- por curiosidad
- para sentirse bien, reducir el estrés y relajarse
- para no sentirse diferentes
- para parecer mayores

Eres tú quien tiene que tomar una decisión respecto de las bebidas. Además de la posibilidad de convertirte en adicto, beber alcohol conlleva algunas desventajas:

* Las personas que beben en forma regular suelen tener problemas en la escuela: la bebida puede afectar la capacidad para estudiar y sacarse buenas notas, además de afectar el desempeño deportivo (por la falta de coordinación).
* La impresión es que la bebida te hace más atractivo, pero los cambios que ocasiona el alcohol en el sistema nervioso pueden llevar a que una persona haga tonterías o cosas vergonzantes, como vomitar o hacerse pis encima. La bebida también produce mal aliento, y a nadie le gusta tener una resaca.
* Los adolescentes que beben alcohol tienen más probabilidades de ser sexualmente activos y de tener relaciones sexuales sin protección y de manera insegura. Si quedas embarazada o contraes una enfermedad de transmisión sexual, tu vida cambiará — o, lo que es peor, llegará a su fin — . Además,
el riesgo de que te lastimes — incluso con lesiones fatales — es más alto si estás bajo la influencia del alcohol. La mitad de todas las muertes por ahogamiento entre varones adolescentes están relacionadas con el uso de alcohol. El consumo de alcohol aumenta considerablemente las posibilidades de que un adolescente termine involucrado en un accidente de tránsito o un homicidio, o de que cometa suicidio.
* Los adolescentes que beben también tienen más probabilidades de engordar o padecer problemas de salud. Un estudio realizado por la Universidad de Washington reveló que las personas que consumían normalmente cinco o más bebidas alcohólicas, una detrás de la otra, desde los 13 años, eran más propensas al sobrepeso o a la hipertensión a la edad de 24 años que aquellas que no bebían alcohol. Las personas que continúan bebiendo mucho alcohol durante la edad adulta corren el riesgo de dañar órganos tales como el hígado, el corazón o el cerebro.