La belleza








En ciertas épocas de la historia eran consideradas bellezas aquellas que no estaban marcadas por la viruela. Durante el Renacimiento y durante siglos en adelante el colorido era lo importante, los consabidos cabellos de oro y labios de rubí. Las exigencias se han ido incrementando y hoy en día la estructura ósea es también importante. Nefertiti me parece una de las pocas bellezas para todas las épocas.

Las damas que hicieron perder la cabeza a los reyes en el siglo XVIII nos parecen que tienen rostros excesivamente llenos e incluso papada. Eso ocurre con madame de Montespan, menos con madame de Pompadour. Muchas bellezas de la Belle Epoque como la Bella Otero parecen ahora comunes e incluso feas. En cambio, en las fotos de Cléo de Merode si puedo ver cierto encanto.


Es verdad que los cánones de belleza cambian pero también es verdad que hay mujeres que producen una impresión en los demás que no capta la cámara, ni el pincel. María Valeria la hija de la emperatriz Elizabeth decía que ningún retrato de su madre se le parecía. Quizás en el caso de disponer de fotos o retratos de Cleopatra no encontraríamos a la famosa belleza de la que hablan los cronistas. Eso me hace pensar en la fotogenia, un don imprescindible en una actriz de cine que no todas las mujeres bellas poseen. Quizás cuando en el futuro miren las fotos de hoy sólo serán consideradas bellezas las mujeres fotogénicas.


1 Nefertiti
2 Madame de Montespan
3 Madame de Pompadour
4 Carolina Otero
5 Cléo de Merode
6 Elizabeth de Austria
7 Gene Tierney