El hombre es animal de costumbre, aprendemos por la repetición, por la práctica.
Conocer la teoría es necesario, pero hay que saber llevarla a la acción, que es la que nos permite aprender más, analizar y desarrollar para mejorar.
Hay múltiples ejemplos, para describir esto, desde pilotar un avión (yo no me montaría nunca si el piloto ha estudiado mucho, pero es la primera vez que va en cabina), hasta el estudiar un idioma, donde el que verdaderamente lo domina es el que lo utiliza diariamente, o reside en el país en el cual se habla .
En el mundo empresarial es lo mismo. Conocer la teoría es muy válido, pero luego, hay que saber llevarla a la práctica, y saber interpretar los resultados para tomar decisiones.
Un director de finanzas por ejemplo, puede saber mucho de números, cuentas de resultados, balances y algo de contabilidad, pero aporta valor interpretando los datos, conociendo el negocio, y participando en las decisiones. Lo pongo como ejemplo, porque esto lo he vivido muchas veces, te envían una cuenta de resultados, y dan su trabajo por terminado.
Hay que conocer la teoría, cada uno en su departamento, pero hay que vivir la práctica en la empresa.
A continuación un vídeo sobre práctica: