Mensaje de SuG y PSC


Esto si que es una sorpresa, dee acuerdo con los menajes en su OHP, así como en sus entradas de sus blogs personales, SuG ha anuncidado que abandona su sello PSC y entraran en hiatus a finales de año.

El siguiente anuncio fue publicado en la OHP de SuG:
Después de nuestra actuación el 29 de diciembre en Yoyogi Kyougijou Daini Taikukan, SuG Oneman Show 2012 "This iz 0", vamos a estar en hiatus.

Como resultado de numerosas discusiones entre miembros y staff, hemos decidido que a fin de que SuG continúe sus actividades, y en mejor interés de los miembros, PS COMPANY, y el futuro de SuG, debemos reiniciar bajo nuevas condiciones. Por lo tanto, una pausa en la actividad es necesaria, así como la separación de SuG de PS COMPANY.

Creemos que este es el mejor resultado para el futuro de SuG.

Hasta que volvamos a empezar las actividades, cada miembro se centrará en su propio trabajo, pero mejorarán y volverán.

Desde nuestro comienzo el 12 de enero de 2007, hasta ahora, hemos sido capaces de continuar como SuG desde hace seis años gracias al apoyo de PS COMPANY, todos nuestros fans, y aquellos relacionados con la banda.

Gracias a todos los que nos han apoyado.

SuG (Takeru . Masato . Yuji . Chiyu . Shinpei)

Y PS COMPANY también actualizó con el siguiente anuncio:

"SuG", quienes pertenecieron a PS COMPANY, entraran en hiatus luego de su actuación el 29 de diciembre en Kokuritsu Yoyogi Kyougijou Kaini Taikukan, "SuG Oneman Show 2012 Thiz is 0", será su show final bajo la dirección de PS COMPANY.

Esto fue un resultado de numerosas discusiones y como deseos de SuG de difundir su punto de vista, y volver a su origen, desde el punto de vista de la compañía respetaremos su decisión y seguiremos apoyando su nuevo camino con todo nuestro corazón.

A todos los fans conectados con la banda, gracias por su gran cálido apoyo y palabras de aliento.

Los miembros de SuG están verdaderamente agradecidos.

Nuestro SuG TOUR 2012, "sweeToxic", continuará como estaba previsto, con todos nuestros corazones puestos en cada actuación.

La información relativa a las futuras actividades serán anunciadas en una fecha posterior.

Sólo queda un corto período de tiempo antes de su hiatus, así que esperamos que continuen apoyando a SuG hasta el final.

Fuente: SuG OHP + PSC OHP 
Créditos: shattered-tranquility
Traducción: saya13 / Arreglos: AniRockers

El reino de este mundo





Una noche en que Solimán y la piamontesa habían quedado solos en la cocina por lo tardío de la hora, el negro, muy ebrio, quiso aventurarse más allá de las estancias destinadas al servicio. Luego de seguir un largo corredor, desembocaron a un patio inmenso, de mármoles azulados por la luna. Dos columnazas superpuestas encuadraban ese patio, proyectando, a media pared, el perfil de los capiteles. Alzando y bajando el farol de andar por las calles, la piamontesa descubrió a Solimán el mundo de estatuas que poblaba una de las galerías laterales. Todas mujeres desnudas, aunque casi siempre provistas de velos justamente llevados por una brisa imaginaria, a donde los reclamara la decencia. Había muchos animales, además, puesto que algunas de esas señoras anidaban un cisne entre los brazos, se abrazaban al cuello de un toro, saltaban entre lebreles o huían de hombres bicorne, con las patas de chivo, que algún parentesco debían de tener con el diablo. Era todo un mundo blanco, frío, inmóvil, pero cuyas sombras se animaban y crecían, a la luz del farol, como si todas aquellas criaturas de ojos en sombras, que miraban sin mirar, giraran en torno a los visitantes de media noche. Con el don que tienen los borrachos de ver cosas terribles con el rabillo del ojo, Solimán creyó advertir que una de las estatuas había bajado un poco el brazo. Algo inquieto, arrastró a la piamontesa hacia una escalera que conducía a los altos. Ahora eran pinturas las que parecían salir de la pared y animarse. De pronto, era un joven sonriente que alzaba una cortina; era un adolescente, coronado de pámpanos, que se llevaba a los labios un caramillo silencioso, o sellaba su propia boca con el índice. Después de atravesar una galería adornada por espejos sobre cuyas lunas habían pintado flores al óleo, la camarera, haciendo un gesto pícaro, abrió una estrecha puerta de nogal, bajando el farol.
En el fondo de aquel pequeño gabinete había una sola estatua. La de una mujer totalmente desnuda, recostada en un lecho, que parecía ofrecer una manzana. Tratando de encontrarse en el desorden del vino, Solimán se acercó a la estatua con pasos inseguros. La sorpresa había asentado un poco su ebriedad. El conocía aquel semblante; y también el cuerpo, el cuerpo todo, le recordaba algo. Palpó el mármol ansiosamente, con el olfato y la vista metidos en el tacto. Sopesó los senos. Paseó una de sus palmas, en redondo sobre el vientre, deteniendo el meñique en la marca del ombligo. Acarició el suave hundimiento del espinazo, como para volcar la figura. Sus dedos buscaron la redondez de las caderas, la blandura de la corva, la tersura del pecho. Aquel viaje de las manos le refrescó la memoria trayendo imágenes de muy lejos. El había conocido en otros tiempos aquel contacto. Con el mismo movimiento circular había aliviado este tobillo, inmovilizado un día por el dolor de una torcedura. La materia era distinta, pero las formas eran las mismas. Recordaba, ahora, las noches de miedo, en la Isla de La Tortuga, cuando un general francés agonizaba detrás de una puerta cerrada. Recordaba a la que se hacía rascar la cabeza para dormirse. Y, de pronto, movido por una imperiosa rememoración física, Solimán comenzó a hacer los gestos del masajista, siguiendo camino de los músculos, el relieve de los tendones, frotando la espalda de adentro a afuera, tentando los pectorales con el pulgar, percutiendo aquí y allá. Pero, súbitamente, la frialdad del mármol, subida a sus muñecas como tenazas de muerte, lo inmovilizó en un grito. El vino giró sobre sí mismo. Esa estatua teñida de amarillo por la luz del farol, era el cadáver de Paulina Bonaparte. Un cadáver recién endurecido, recién despojado de pálpito y de mirada, al que tal vez era tiempo todavía de hacer regresar a la vida. Con voz terrible, como si su pecho se desgarrara el negro comenzó a dar llamadas grandes llamadas, en la vastedad del Palacio Boghese. Y tan primitiva se hizo su estampa, tanto golpearon sus talones en el piso, haciendo de la capilla de abajo cuerpo de tambor, que la piamontesa, horrorizada, huyó escaleras abajo, dejando a Solimán de cara a cara con la Venus de Canova.

El reino de este mundo, Alejo Carpentier

NOTA: Solimán es un esclavo masajista que Pauline (hermana de Napoleón, primero esposa del general Leclerc y luego de Camillo, príncipe Borguese) tiene en Haití. Lleva a cabo rituales de vudú para ella con el fin de curar a su esposo el general Leclerc, que ha contraído la fiebre amarilla. Solimán termina en Europa donde se cruza con la estatua de Pauline que le conduce a la locura, al final morirá de malaria.
Pauline Bonaparte como Venus Victrix se encuentra en la Galería Borguese en Roma.

Tres reglas simples de la vida

Voy a tratar de implementar lo siguiente:
1) Si no persigues aquello que quieres, nunca lo conseguirás.
2) Si no preguntas, la respuesta siempre será no.
3) Si no das un paso adelante, siempre estarás en el mismo sitio.

Porque...
1) Si no nos proponemos metas en la vida, vivir no tiene sentido. El hecho de buscar, de luchar, de perseguir aquellas cosas que deseamos es lo que nos mantiene activos, es lo que nos hace dar cuenta de lo fuertes que somos, de como todo tiene su recompensa...
2) Hay algo que mi papá siempre me dice: Ya tenés un NO como respuesta, andá por el SI. Es así, desde el principio tenemos que aceptar una respuesta negativa para así poder pelear por la respuesta positiva.
3) Si no dejamos atrás el pasado, aquello que no tiene vuelta atrás, no podremos ver el futuro, aquello que nos espera. Es difícil, y a mí me está costando muchísimo, pero tarde o temprano nos daremos cuenta que lo mejor siempre espera adelante... Las cosas que fueron, pasaron por algo. Las que no fueron, no pasaron porque no tenía que ser así. No podemos cambiar lo que fuimos, lo que hicimos, lo que dijimos y sentimos. Pero sí podemos soñar con un futuro mejor, aprender del pasado y evitar cometer los mismos errores.


Te amo, perdón y gracias

Lunes 18 de mayo de 2009

Definitivamente pensé que eras diferente a todos los demás, pensé que vos ibas a ser la excepción… pero una vez más me equivoqué. Dejaba TODO por estar con vos, ponía todas las fichas… pero me demostraste todo lo contrario a lo que yo me imaginaba.
Ya nada queda de ese sentimiento que nos unía. Hoy puedo decir que no tenemos: la misma confianza, las mismas charlas, los mismos momentos, ni siquiera tenemos una AMISTAD. Esa amistad que nos hacía diferente a los demás. Juro que no me arrepiento de nada de lo que hice con vos. Sí me arrepiento del tiempo que perdí creyendo cosas que nunca tendría que haber creído.
Fuiste muy importante para mi, y hasta acá llegué. Pensé que esta historia iba a ser mejor. Pero no fue así.
No te voy a juzgar más por tus errores porque yo también tuve los míos. Para vos tengo sólo tres palabras:
• UN GRACIAS: por todos los momentos que pasamos juntos, por cada tontería que hacíamos juntos, por cada abrazo, cada beso, cada charla. Siempre vas a estar en mi corazón
.
• UN PERDÓN: por los errores que tuve, por los mocos que me mandé, por amarte tanto sin darme cuenta de que te estaba perdiendo como amigo.
• Y UN TE QUIERO: porque a pesar de que NADA sea igual que antes, por los momentos que hayamos pasado, y por más que ahora estemos mal, siempre te voy a amar.
Capaz esta no sea la forma correcta de decirte lo que pienso, pero ya no tenemos ni momentos para hablar, ya no existen esas charlas en las que nos decíamos todo lo que pensábamos, por eso lo tengo que escribir acá, porque es la única forma que me queda.
Ojalá algún día lo leas y entiendas porque dejo todo esto de lado, porque ya no vale mas la pena sufrir, ni llorar por nada. 


Vuelvo a estar como tres años atrás, el ciclo se repite. Todo lo que escribí en un pasado es realidad ahora... no hay nada nuevo, no hay ningún cambio. Seguiría diciéndole esas tres cosas: gracias, perdón y te quiero (lo cambiaría por un te amo). Le diría gracias por todos esos momentos hermosos que compartí a su lado, perdón por lastimarlo, por abandonarlo, por haberme dado por vencida... y te amo, le diría que lo amo más que a nada en el mundo y que siempre va a tener un lugar en mi corazón, por más que pase el tiempo... es mi gran amor, el amor de mi vida, y siempre va a ser así, no existe ni va a existir uno igual. Realmente nunca me curé, realmente nunca dejé de pensar en él, nunca lo arranqué de mi vida, sólo hubo un espacio, un paréntesis en el cual se alejó de mi lado... pero ahora que está cerca, no como antes, pero cerca al fin... ay mi Dios, así sea que lo pierda para siempre, prefiero arriesgarme y perder a no haberlo intentado nunca.

Dejarse ir...

“Lloramos al nacer, por tener que entrar en este gran escenario de locos”. William Shakespeare

VIERNES 7 DE AGOSTO DE 2009

¿Qué hacer cuando no sabes que hacer? ¿A quién acudir? ¿Hacia donde correr? ¿En dónde esconderse? ¿Qué decir, qué callar? ¿Qué mirar, que tocar? ¿Qué sentir, qué vivir? ¿Qué elegir, qué obviar? ¿Qué olvidar, qué recordar? ¿Qué soñar, qué pensar? ¿Estaré haciendo lo correcto? ¿De que dependen mis acciones? ¿En dónde voy a terminar? ¿A quién lastimaré, a quién ayudaré? ¿Diré realmente lo adecuado? ¿Servirán mis palabras de algo? ¿Alguien me está escuchando? ¿O es todo un eterno silencio sin respuestas para mí? ¿Cuándo llega el fin? ¿En donde comienza el principio? ¿Cuánto aguantaré? ¿Cuánto me esforzaré? ¿Cuál será mi recompensa? ¿Vale la pena luchar por mi sueño? ¿Debo hacer caso a lo que el resto dice o hacer oídos sordos? ¿Tengo oportunidad? ¿Tengo opción? ¿Qué estará pensando de mí en este momento? ¿Me querrá?
¿Qué hacer cuando la vida se transforma en un torbellino de emociones y nos mareamos de tal forma que no encontramos el camino adecuado, cuando se transforma en un sinfín de dudas que nos provoca un gran vacío?
Hay veces en las que soñamos con sólo dejarnos llevar para dejar atrás las preocupaciones. Salir corriendo. Volar. Escapar. Trepar montañas. Alcanzar el cielo. ¿Quién nunca soñó con desaparecerse aunque sea por un instante, con abandonar todo, con olvidar el pasado, con esconderse y que ya nunca nadie lo mire? Así nos sentimos cada vez que alguien nos lastima, cada vez que alguien nos contesta mal, cada vez que nos salen mal las cosas, que pasamos vergüenza. ¿Acaso no es humano cometer errores? Lo es, y también es humano reconocerlos. De ellos aprendemos. Sólo así sabemos qué está bien y qué está mal. Sólo así nos vemos comprometidos con nosotros mismos, cuando nos proponemos a cambiar, cuando asumimos que estuvimos mal y pedimos perdón, cuando la vida nos da una segunda oportunidad para aprovechar. Nadie nace sabiendo. Todo se aprende. De a poco, pero se aprende. Es cuestión de abrir la mente, de aceptar diferentes puntos de vista, de no olvidarse de quienes somos, de levantarse cada vez que nos caemos…