LA APORTACIÓN DE VALOR


Solo continuamos en el mercado si somos capaces de proporcionar algo (producto o servicio) que genere un valor a aquel que lo compra (cliente). A mayor generación de valor, más opciones para que te compren o para poder vender (a precios acordes al valor generado).

Vivimos en una zona en la que no podemos competir por precio, con lo que debemos buscar la aportación de valor en otras áreas. Hay muchas empresas que no se plantean éste tema, y finalmente terminan cerrando. Rara vez el mercado da un vuelco tal que te quedes fuera del mismo de la noche al día (salto disruptivo). Normalmente, el mercado va dando avisos, y tenemos que ser capaces de leerlos para poder reorientarnos.

Se puede generar valor de muchas maneras, y no tiene porqué estar centrado exclusivamente en el producto. Se puede generar valor en la relación con el cliente, en el apoyo técnico que se le da, en la solución que se le da al cliente cuando éste tiene un problema, en la calidad del producto que se suministra,…

Las empresas deberíamos cuestionarnos si realmente las cosas nuevas (productos y servicios) que queremos implantar o las que ya hacemos, aportan valor al mercado. Contestar a la pregunta “y esto, ¿aporta valor al mercado?

Algo que leí hace algún tiempo, pero que se me quedó marcado, es el tener claro el momento en el cual se produce el valor. Me explico con un par de ejemplos; si contratamos una consultoría muy buena, y trabajando conjuntamente diseñamos un plan fantástico, estará muy bien, pero sirve para poco. El verdadero valor se genera en el momento en que implantamos ese plan. Análogo para las reuniones. Podemos realizar muchas reuniones fantásticas, y establecer muchas acciones, pero realmente, generamos valor cuando llevamos esas acciones a la práctica.

Como hemos oído tantas veces: “El cliente siempre tiene la razón
La verdad es que no la tiene siempre, y hay que defender nuestra posición cuando hay que defenderla, pero lo que sí es cierto, es que solo te comprará si lo que adquiere le genera un valor mayor de lo que ha pagado por ello.

LA COHERENCIA EN EL MENSAJE Y EL MOMENTO APROPIADO

Hace un par de días vi el anuncio de Navidad de Campofrio “Hazte extranjero”. Lo cuelgo a continuación: 

Hoy viene en prensa la siguiente noticia: “La mexicana Sigma y la china Shuanghui controlarán campofrio”). 

http://elpais.com/economia/2013/12/23/actualidad/1387792647_106070.html


LA COHERENCIA
Decimos una cosa y hacemos otra. No hay coherencia en nuestros mensajes, y perdemos credibilidad. La comunicación no es solamente lo que se dice, es también lo que se hace.



EL MOMENTO APROPIADO 
Siempre hay que cuestionarse si es el momento apropiado para llevar a la acción eso que queremos hacer. A veces hay que echar atrás y esperar que llegue el momento idóneo, otras, simplemente, hay que echarse atrás y no hacer lo que se tenía previsto hacer, ya que no se dan las circunstancias para poder llevarlo a cabo.

Siempre es aconsejable medir la reacción que producirá la acción en un momento determinado, y prepararse en los diferentes escenarios.

SEPARACIÓN OFICINAS Y PLANTA

En la mayoría de las empresas industriales hay un muro invisible que separa al personal de oficinas del personal de planta.
Cuento a continuación un ejercicio que he realizado en la última reunión trimestral de este año, el 19 de diciembre:
1. Preparo la sala: Coloco las mesas enfrentadas. Creo dos bandos claros. En un lado pongo sobre la mesa y en la pared un cartel naranja que especifica OFICINAS. En el otro lo mismo, pero el cartel dice PLANTA






2. Voy a las sala a las 13h30, hora en que empezamos. Como era de esperar, los de oficinas están en un lado y los de produccion en el otro. 






3. Proyecto la imagen de dos monjes llevando a una mujer y les cuento el siguiente cuento: 


Dos jóvenes monjes salieron por primera vez de su monasterio para realizar un viaje.
Su mentor los advirtió de los peligros del mundo y especialmente les previno para que evitaran el contacto con mujeres dada su juventud e inexperiencia.
Cerca del vado de un río escucharon los lamentos de alguien pidiendo ayuda.
Uno de los monjes se acercó a unos matorrales y vio a una mujer herida y desnuda.
El monje la cargó en brazos y cruzó con ella el río hasta llevarla a un pueblo cercano en el que la asistieron.
Durante este recorrido el otro monje no paró de recriminarlo. Una vez que salieron de aquel pueblo y reemprendieron la marcha las recriminaciones no cesaron.
- ¡Has llevado a una mujer en brazos ¡ ¡ Y además estaba desnuda ! ¡El mentor nos advirtió de que ni siquiera nos acercásemos a ellas y tú la has cargado en brazos!
Y así continuó durante varias leguas hasta que el monje compasivo se cansó de escucharlo y le contestó.
- Yo solté a la mujer cuando llegamos al pueblo, pero tú aun la llevas encima. 

4. Después lanzo el mensaje: hay mucha gente que tiende a refugiarse siempre en el pasado. Gente rencorosa, que no olvida ni siquiera los detalles. Tenemos que dejar descansar a la memoria.


Siempre ha habido un muro invisible entre oficinas y planta, fundamentalmente construido por la gente de planta. Yo, personalmente, no veo el muro, no hago distinción entre las personas de oficinas y planta. Somos todos trabajadores de Hidro Rubber. A continuación le pido que se levanten y que pongamos las mesas como siempre y nos mezclemos.

5. En enero entregaremos con la Comunicación nómina de diciembre un folio con el cuento y las fotos que saqué (refuerzo).

HERRAMIENTA: EL "SÍ, QUIERO!"

Lanzamos un tema a la organización sobre el que trabajar. Se especifica un objetivo, horas de trabajo estimadas y fecha de finalización. En ocasiones, si es necesario, un presupuesto. Se coloca un folio en los tablones (planta y oficinas), para que se apunte el que quiera colaborar (involucrarse en ese tema).
Lo hacemos con el objetivo de mezclar a la gente, oficias y planta, y para trabajar en equipo en algo diferente al día a día. 

El equipo trabajar en horario laboral.

Este año, hemos lanzado seis. Un ejemplo:

Se apuntan a este "sí quiero!": adjunto de compras, dos administrativos, contabilidad y un operario.

El resultado:
Un kit de supervivencia: Una mochila, una linterna, una manta, un calendario de la empresa, turrón, un vale para un desayuno continental, una botella de vino, una capa para la lluvia. 




Recomendaciones del kit de supervivencia


GRANDE!: Muy buenas recomendaciones del kit de supervivencia para empezar el 2014 con energía!

LA FORMACIÓN

Bajo mi punto de vista, una empresa no debe hacer formación con perspectiva anual. El plan de formación, al igual que la estrategia debería tener un horizonte de 3 o 5 años. Es decir, debiéramos trabajar bien los conceptos sobre los que nos queremos desarrollar, y realizar formaciones a medio-largo plazo.
En más de una ocasión me ha sucedido que alguien detecta una necesidad un año, no ha podido acudir al curso externo por que no había suficiente gente y no lo ha hecho ese año. Sin haber cubierto esa necesidad internamente en la empresa, cuando solicitas las necesidades del próximo año, esa necesidad del año anterior no está. ¿Cómo puede ser esto?
He aprendido que es muy importante definir bien la necesidad. Muchas veces hablamos de una acción de formación genérica, que no cubre la verdadera necesidad.
El ejemplo claro es la formación en liderazgo. El liderazgo en cada organización es diferente. Un curso genérico sobre liderazgo solo sirve para tener conocimientos generales sobre la materia, normalmente poco aplicables. Es mucho mejor definir el liderazgo en tu organización en 3 conceptos, y trabajar las habilidades necesarias. Si por ejemplo, una de ellas es la comunicación, deberíamos establecer un plan de acción sobre esta materia a medio- largo plazo. Nivel que se tiene, nivel que se desea adquirir y plan de acción a 3 años, por ejemplo.
Parte de la formación puede ser externa, pero no debemos olvidar la formación interna, a mi juicio, importantísima. Se aprende con la práctica, y la empresa es un lugar ideal para practicar.


Dejo aqui el videoCV de Luis Castro. En su dia me impactó.