Amor improbable

Lunes 11 de mayo de 2009

“Realmente, ¿En qué estaba pensando? ¿En que vendrías a buscarme algún día? ¿En que algún día me amarías como yo te amo? ¿En que verdaderamente te importo siquiera un poco? ¿En que en algún momento del día pensás en mí? ¡Es absurdo! Me siento tan tonta…desperdiciando tanto tiempo de mis pensamientos dedicados a vos. Desperdicié horas de mi vida llorando por tu amor, por ese amor que nunca tuve y ahora veo que nunca tendré. Desperdicié y derroché palabras, poemas de amor, sentimientos de cariño y aprecio hacia una persona a la que ni siquiera le importo, que ni siquiera se acuerda que existo, que ni siquiera es mi amigo.
Ya no aguanto estar tan lejos de vos. Me enteré que estás saliendo con alguien. Bien por vos. No voy a mentir diciendo que me alegro porque no es así ciertamente, pero tampoco voy a decir que me pone mal. Es más, siento que me estás ayudando. Ayudándome a olvidarte. Y lo bien que hacés, porque sé que lo nuestro es un amor imposible e inalcanzable. Cada uno tiene que seguir su vida. Me duele decirlo, pero tal vez nuestro destino no sea estar juntos.
Desde que te conozco, con lo único que sueño es estar a tu lado…sentirme feliz y protegida junto a vos. Nunca antes me había pasado con alguien. Era una cosa que cada vez que te veía me brillaban los ojos. Mi soledad ya no existía, mi alegría se contaba con tus sonrisas, mi dolor con tus lágrimas, mis sueños eran sobre vos, mi contención tus abrazos, las caricias tus manos y el amor eras vos.
Yo…siendo tan orgullosa, ¡era capaz de bajar la mirada al verte pasar! Era capaz de dar la vida por vos. Lo eras todo para mí, y te juro que nunca en mi vida sentí dolor tan grande como este que siento ahora, el dolor de haberte perdido, el dolor de que te hayas alejado, el dolor de que me trates con indiferencia, el dolor de saber que te vas sin siquiera saber lo mucho que te amo.
Las cosas ya no son lo que eran.  Lo que antes era un sueño, es ahora una pesadilla… ¡y quiero despertarme! Me siento débil y derrotada, ya no tengo fuerzas para seguir adelante. Mi corazón tiene un límite, y creo que hasta aquí llega. Sé que dije que podría amarte por siempre, pero siempre es mucho tiempo, y a medida que pasan las horas yo más me desespero y más cuenta me doy del daño que me hace que estés en mi corazón.
Mi corazón partido está… ¿de qué me vale llorar si la herida ya fue provocada? Cuando te fuiste en busca de otro amor…yo me quedé sola y sin una parte de mi corazón, porque te extrañaba cada día más y más. Me robaste mi otra mitad. ¡Que ignorancia la mía! Me entregué como si nada. ¡Te amaba tanto! Y es increíble como alguien puede romper tu corazón, y sin embargo sigues amándole con cada uno de los pedacitos que te quedan.
Me equivoqué con vos. No sos el amor de mi vida como pensaba hasta hace unos minutos. Vos tenés tu vida, yo tengo la mía. Tengo que seguir adelante, así sea que no tenga el valor para hacerte a un lado, tengo que hacerlo porque ya no soporto este frío dolor que me congela el alma, me cierra los ojos, me tapa los oídos y me aleja de la realidad, de la triste realidad de la que formo parte.
¡Basta! Hasta acá llegué. No me pidas más. No puedo amarte más”.



"Es mejor haber amado y perdido que jamás haber amado". Alfred Tennyson

Amor imposible es saber que pudo haber sido, si hubiera actuado a tiempo, si hubiera sabido... Amor improbable es tener la conexión y saber que el tiempo no lo permite, por una cosa o por otra, es algo lejano... 

Y a pesar de todo no pierdo las esperanzas. La vida cambia constantemente y cuando menos lo esperas te da la mejor sorpresa. De nada me arrepiento, pero me arrepentiría si te vuelvo a tener y te dejo ir sin luchar.

 Amor imposible es conocerte y no tenerte. Pero así es la vida y si debe ser será, si tenemos que estar juntos, vamos a estar, y si no, tal vez en la próxima vida. Mi imaginación no tiene limites, y en ella he vivido un millón de vidas contigo y en cada una fuimos felices. Amor improbale me dice que todavía puedo hacer mis sueños realidad. Me dice que todavía estás ahí... 

Porque lo improbable es por definición probable, lo que es casi seguro que no pase y que puede pasar. Y mientras haya una posibilidad, media posibilidad entre mil millones de que pase, vale la pena intentarlo.